Los tipos de memoria y cómo funciona el cerebro para evocar un recuerdo

La capacidad cognitiva de los humanos de organizar información en categorías es esencial para la vida diaria. Técnicas para mejorar esta capacidad y un sencillo truco para recordar nombres. No toda la memoria es igual: existen diferentes tipos de recuerdos, algunos que son pasajeros y otros que duran toda la vida.

De la redacción de EL NORTE 
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¿Qué es la cognición? Es un término que proviene de una palabra latina que significa ‘el acto de conocer’. Se refiere a todos los procesos del cerebro que te permiten pensar y actuar conscientemente, experimentar lo que sucede a tu alrededor y sentir emociones. Los procesos cognitivos contrastan con los muchos procesos que tu cuerpo realiza sin que pienses en ellos, como respirar y el latido de tu corazón. No necesitas pensar para que esas funciones ocurran.

Estos procesos mentales implican conciencia, percepción, juicio, razonamiento, aprendizaje y memoria. Es importante remarcar, sobre esto último, que no toda la memoria es igual: existen diferentes tipos de recuerdos, algunos que son pasajeros y otros que duran toda la vida.

Las siguientes son las formas de memoria más comunes.

– Memoria episódica: este es un tipo de recuerdo que debes recordar conscientemente. La memoria episódica es la memoria de experiencias y eventos específicos. Sus recuerdos pueden ser diferentes de los de otras personas sobre las mismas experiencias. Los detalles específicos vinculados a la memoria episódica suelen incluir sentimientos, tiempo y lugar. Los expertos creen que la emoción influye en cómo se forman estos recuerdos. Ejemplos de recuerdos episódicos pueden incluir el nacimiento de un hijo, graduarse de la escuela secundaria, su primera cita con su cónyuge o unas vacaciones hace unos años.

Cuánto tiempo se almacena la información: minutos a años.

– Memoria semántica: este es un tipo de recuerdo que debes recordar conscientemente e implica lo que sabes sobre el mundo que te rodea. Es un registro estructurado de hechos y significados de palabras, conceptos y conocimientos. Es posible que estos recuerdos alguna vez hayan tenido un contexto personal, pero ahora se mantienen por sí solos como simple conocimiento. Incluye cosas como la comprensión de las matemáticas; cómo funcionan los objetos, definiciones de palabras, conocimiento sobre animales específicos y recordar dónde se encuentra un Estado. Cuando los adultos mayores dicen que tienen problemas para recordar los nombres de los objetos y de las personas, esta es la parte de la memoria que suelen describir.

– Memoria de procedimiento: esta es la memoria de cómo hacer ciertas cosas. Estos recuerdos a menudo se forman temprano en la vida: por ejemplo, cuando aprendiste a atarte los zapatos y a andar en bicicleta, y más tarde, a conducir un automóvil. Estas tareas se realizan una y otra vez y quedan tan arraigadas que son casi automáticas y no requieren mucho pensamiento consciente, si es que requieren alguno.

– La memoria de trabajo: ésta es la memoria para almacenar y administrar información de manera temporal, manteniéndola fácilmente accesible. Mantener un número de teléfono en la cabeza antes de marcarlo o seguir rápidamente una ruta o volver sobre un paso en la mente son ejemplos.

Pero esto es parcialmente cierto. A diferencia de los libros en los estantes de una biblioteca, tu cerebro no almacena una memoria completa en un solo lugar. En cambio, el hipocampo del cerebro divide las memorias en partes, tales como cómo se ve un objeto, sus olores, sonidos y sensaciones. Luego almacena estas piezas en diferentes partes de tu cerebro.

Por ejemplo, la melodía de una de tus canciones favoritas puede almacenarse en tus lóbulos temporales, las áreas de tu cerebro que te permiten interpretar sonidos. Lo que sabes de la letra, o lo que significa, puede almacenarse en tus lóbulos frontales, responsables del lenguaje y la memoria. Y luego pueden estar las emociones que asocias con la canción o con el cantante. Esta información puede almacenarse en otras partes de tu cerebro.

Cada vez que escuchas la melodía en la radio, tu cerebro trabaja, reensamblando una sola memoria a partir de muchas ubicaciones diferentes, y ahí la tienes: reconoces la canción y puedes cantar junto con ella.

Cómo recordar los nombres

Las memorias almacenadas en tu cerebro se dividen en diferentes categorías.

Tu memoria de trabajo te permite retener una pequeña pieza de información, como un número de teléfono, durante un corto período de tiempo. Luego, la información se descarta o se transfiere a tu memoria a largo plazo.

Las personas que dicen que tienen problemas de memoria a corto plazo en realidad están describiendo problemas para recordar información de minutos a días después de aprenderla, no problemas con la memoria de trabajo.

Mientras que la transferencia de información de tu memoria de trabajo a tu memoria a largo plazo puede parecer simple, la memoria a largo plazo en sí misma es mucho más compleja. Almacenar información desde tu memoria de trabajo hasta tu memoria a largo plazo ocurre a través de un proceso llamado consolidación.

Aprender y recordar el nombre de una persona es un ejemplo de cómo la información en tu memoria de trabajo se transfiere a tu memoria a largo plazo. La memoria a largo plazo de tu cerebro puede almacenar la información desde varios minutos hasta toda una vida.

Cuando aprendes el nombre de alguien, esa información forma un camino en tu cerebro. Para aprender la memoria a largo plazo, ese camino debe fortalecerse. Hay muchas maneras en que esto pueda ocurrir: puedes concentrarte en el nombre cuando lo aprendes por primera vez, repetir el nombre después o relacionarlo con algo familiar. Cualquiera de estos pasos puede ayudarte a recordar.

Supongamos que acabas de conocer a tu nueva vecina, pero recordar nombres es un desafío para ti. Para ayudarte a recordar su nombre, puedes relacionarla con Sydney, Australia. La próxima vez que la veas, si no recuerdas su nombre, pensarás en Australia y eso te recordará que su nombre es Sydney.

Esta asociación te ayuda a recordar su nombre rápidamente cuando necesitas. Con el tiempo, ese camino se fortalece y se convierte en parte de tu memoria a largo plazo, de modo que puedes acceder a él cuando lo necesites.