miércoles, 27 noviembre, 2024
Edición Diaria
Edición N°

CENSO SENSACIONAL DE SENSACIONES VARIAS

CRÓNICAS DE LA TIERRA MEDIA

¿Qué censaron los censistas? ¿Censaron cómo se auto percibe cada uno en esta existencia? ¿Censaron las pasiones que nos mueven? ¿Armaron alguna radiografía de una presunta argentinidad que suena más a estafa que a sentimiento? ¿Hay censos sentimentales? ¿De sueños y frustraciones? ¿De lo que se espera de la vida y lo que se obtiene? Deja censista, todo bien.

Germán Rodríguez
redaccion@diarioelnorte.com.ar

El frio se lo comía crudo, entraba por todos lados, la cobija llena de agujeros no daba para más y sentía ese vientito agudo, criminal rajándole la cara, ni un gorro había manoteado, pero aun así sobrevivía contra la pared del banco. Tenía hambre pero siempre tenía hambre era como una codena eterna de algún dios desahuciado. El cartón estaba húmedo y de poco le servía.

-¿Cuantos viven acá?

-Yo solo “mija”

-¿Habitaciones?

-Esta que ve

-Especifique

-Una

-¿Es dormitorio?

-Sí, súmale comedor, baño y living

-Voy tildando, ¿de qué es el techo?

-De la bóveda infinita

-¿Gas?

-De vez en cuando me tiro alguno

-¿Agua?

-Mangueras, canillas, porque eso de que un vaso de agua no se le niega a nadie no es tan cumplible

-¿La familia como se compone?

-Tengo un perro que va y viene, nos damos calor mutuamente

La censista anota todo, saca la calco del sello y se la pone en la frente. “ha sido censado”.



Preguntas

¿Sabremos cuantos somos? ¿Que nos falta? ¿Que nos sobra?, ¿Sabremos que queremos? ¿Para qué estamos? ¿Adónde vamos? Pero las preguntas existenciales seguirán siendo las mismas: ¿Qué es peor? ¿Descender o perder la final con tu máximo rival? El argentino tiene y busca su identidad, habrá cuestiones aborígenes en el cuestionario siendo que lo aborigen ya desapareció finalmente con la globalización, ¿Quedará algún espacio para el ser argentino si el celular va construyendo una nueva identidad? ¿El censo captará la esencia de la pluriculturizacion y el acento neutro que tienen los chicos de tanto ver YouTube?

¿Captaran en las encuestas cuantos corazones quedaron rotos y cuantos anhelantes en esta era de amores fugaces al ritmo de historias de Instagram? ¿Se especifica de que club es hincha cada uno?, ¿Se discernirá de una vez por todas aquello de la mitad más uno, siendo este el secreto de rivalidades absurdas que sirven solo para exteriorizar el odio que acumulamos de tanta frustración?

¿Le darán una cifra a la pobreza definitivamente y servirá para cambiar algo? ¿Por lo menos que para aquellos que todavía se sienten clase media se den cuenta que bajaron al llano?

Dicen que el censo sirve más que nada para que los relatores de futbol durante el mundial puedan especificar exactamente cuántos millones de argentinos acompañaran a Messi cuando gambetea a un rival.



Datos

¿Son los datos la realidad? ¿Son los números lo macro?, ¿De qué están hechos los sueños si la verdad es una entelequia, es un punto de vista, es una inexistencia? Somos un continuo sueño que despierta en el final.

El censo sabe de clase media, alta o baja, de que los nuevos pobres se agarran como gatito de poster a la soga de la clase media para poder seguir criticando a los ricos y jugando a lo facho con los de abajo.

¿Qué dicen las estadísticas del hambre y los sin techo? ¿De los que hoy no llegan a fin de mes y se desesperan ante lo inevitable?, ¿Que dicen de ese dolor de no poder ser lo que a uno le prometieron y enseñaron que sea?, ¿De no llegar nunca a cumplir las metas impuestas por un sistema estructurado para frustrarnos?, ¿De cuantos argentinos se dan cuenta de que todo es absurdo? ¿Habrá en los datos estadísticas de cuantos sienten que están pero no están?, ¿Que las cosas nos manejan y somos repetidores de consignas establecidas para que nos identifiquemos sin saberlo?

¿Sale en los datos cuantos son seres genuinos y cuantos solo dicen lo que les dijeron que deben decir?, ¿De qué estamos en el eterno retorno de un mundo que de repetirse tanto ya aburre?



¿El censo podrá revelar la esencia del ser argentino, dará una idea de si tenemos identidad realmente o solo jugamos a una mentira? ¿Entenderemos que el ser argentino no es el porteño canchero que sale a pavonearse por el mundo? ¿Qué ese pensamiento es discriminar a todas las provincias, con el sentido unitario del ser? Otra vez el puerto contra el interior. ¿El censo dirá de una vez por todas que lo único que nos une es una historia oficial creada a fines del siglo XIX con el afán de darles un sentido de unidad e identidad con el territorio a los inmigrantes que añoraban la vieja Europa y que no se encontraban en nuestras amplias llanuras y la tradicional pachorra? Héroes agarrados a la fuerza que en su momento fueron defenestrados muriendo pobres o en el exilio y ahora se convirtieron en ciudades plazas y avenidas para en una repetición sin fin entrar a sangre y pluma en la conciencia y así cerrar un concepto que hoy se identifica en la época de mundiales. ¿Se sigue cantando el himno? ¿Para qué?

La pasión es parte de la esencia nos dicen, es dibujo del ser, es la identidad con la que nos mentimos dándole sabor a la vida insulsa. Cuando la selección mete un gol nos abrazamos entre todos porque en ese momento mentimos que somos uno. Y así estafándonos se nos va la vida