ADVIERTEN QUE SE TRIPLICÓ EL CONSUMO DE OXÍGENO EN LOS HOSPITALES BONAERENSES

El viceministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak, graficó el complejo escenario sanitario que enfrenta la gestión de Axel Kicillof. “Tenemos ambulancias con mucha dificultad para conseguir un destino. Hay saturación extrema”, indicó.

La situación sanitaria en la provincia de Buenos Aires es cada vez peor. Así lo retratan los funcionarios de la gestión que conduce Axel Kicillof y los datos que día a día publica el ministerio de Salud bonaerense. Este domingo el viceministro de esa cartera, Nicolás Kreplak, contó que en los últimos diez días “se triplicó el consumo de oxígeno en cada uno de los hospitales” y pidió que haya mayor producción.
El funcionario contó que el Gobierno de la Provincia quiere prevenir un escenario de colapso similares “a los que se vieron en Perú o Manaos”, en donde “no alcanzaba la provisión de oxígeno y había desesperación en la gente para poder conseguirlo”. “Le pedimos a la industria que rellena los tanques que se vuelque completamente a lo sanitario. Hay que producir oxígeno. Lo tubos de los hospitales que antes se llenaban una vez a la semana, hoy se llenan cada dos días”, explicó.
En diálogo con Radio del Plata, Kreplak fue contundente sobre la necesidad de tener oxígeno. “Si tenemos respiradores, pero no tenemos oxígeno, no sirve de nada”, precisó. En ese sentido, contó que el gobierno de Kicillof “compró máquinas nuevas que fabrican oxígeno y que pusimos a funcionar unas que hace 20 años estaban abandonadas”, sostuvo. Y agregó: “Con eso llenamos tubos de oxígenos para los centros de salud”.
“Nos preparamos para evitar el colapso. Si no tenemos oxígeno para quien lo requiere, sería una situación de colapso”, aseguró.
En otro tramo de la entrevista radial dijo que la mitad de las camas del sector público están siendo ocupadas por personas con medicina prepaga y remarcó que “hay saturación extrema” en el AMBA. “La situación ha llegado a sobrepasar la capacidad de respuesta. En la Ciudad de Buenos Aires, estimo que hace 2 semanas se empieza a observar fuertemente el vuelco de las personas con medicina prepaga al sector público”, señaló.
“Hoy tenemos el 50 % de las camas del sector público ocupadas con personas con obras sociales”, indicó Kreplak, al tiempo que consideró “difícil hacer un análisis de cuántas camas públicas quedan en un lugar” porque “el sistema entero está saturando al otro”.

Escenario grave

El funcionario de la cartera de Salud graficó un escenario de extrema complejidad sanitaria para los próximos días. “Tenemos ambulancias con mucha dificultad de conseguir un destino, sobre todo en el sector privado que tienen dificultades de conseguir camas. Hay saturación extrema”, manifestó. Y expresó: “Llegar 12 horas después a una asistencia, pierde parte del efecto de prevenir”.
“Nos queda por ahora toda la semana que viene unos días de pico, de ingreso de pacientes con un sistema que no tiene la capacidad de atender más pacientes. El colapso nos va a suceder en tanto tengamos una incapacidad de seguir conduciendo el sistema de salud de la forma en la que habitualmente se conduce”, remarcó.
Un ejemplo claro que expuso y que muestra la gravedad de la situación en el AMBA tiene que con la forma en la que se están gestionando las camas de terapia intensiva. “La atención terapéutica está dejando de depender de la indicación, depende de la disponibilidad”, afirmó.