Cómo sostener la lactancia materna en verano

En Argentina, la lactancia exclusiva hasta los 6 meses creció el 50% en la última década. Para los especialistas es una señal auspiciosa, y destacan la importancia de prolongar las licencias por maternidad, flexibilizar los horarios laborales y adaptar los lugares de trabajo para mejorar las estadísticas. EL NORTE dialogó con la Lic. Carolina Alva sobre cómo mantener la lactancia en esta época del año, en la que la demanda de los más pequeños es mayor por las altas temperaturas. 

De la Redacción de EL NORTE 
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Si bien hoy el 45% de los niños se alimentan con lactancia materna exclusiva los primeros 6 meses de vida, lo que representa un crecimiento del 50% respecto de 2011, especialistas en pediatría aseguran que es posible que esa cifra siga creciendo en forma sostenida a partir solamente de un mejor cumplimiento de la legislación vigente. Según datos oficiales de la Encuesta Nacional de Lactancia Materna (ENaLac) de 2022, elaborada por el Gobierno nacional, la prevalencia de lactancia materna exclusiva a los seis meses de vida alcanza al 45%, mientras que en 2011 ese indicador ascendía solo al 30%. EL NORTE dialogó con la especialista Carolina Alva –puericultora, consejera en lactancia materna y Lic. en Fonoaudiología– sobre cómo mantener la lactancia en esta época del año en la que la demanda de los más pequeños es mayor.

“En pleno verano, con altas temperaturas, los bebés necesitan, como nosotros, hidratarse con mayor frecuencia. Es por ello que podemos notar que a las tomas habituales, se suman mamadas más frecuentes, de corta duración que ayudan a satisfacer esta necesidad. La leche cambia la composición en cada toma. La primera porción que el bebé extrae es rica en agua, y sacia su sed en pocos minutos. Por ello cuanto más calor, más tomas cortas e intermedias realizarán. Es muy importante estar atentos a las señales del bebé, que con sus movimientos corporales (giro de cabeza, apertura de boca, estiramiento, movimientos, etc.), nos avisará que necesita pecho. La mamá siente más sed al amamantar, la naturaleza se ocupa de que ella también se hidrate de forma frecuente”, explicó. 

RECOMENDACIONES

Entre las recomendaciones, la especialista precisó: “Por eso, siempre hay que tener a mano un vaso de agua fresca a la hora de amamantar. Buscar, además, un lugar fresco en la casa puede ser de comodidad para ambos. Colocarse una sabanita debajo de la cabeza del bebé disminuirá el calor corporal activo en la práctica de la lactancia. Si la mamá trabaja o planea realizar una salida de varias horas, puede sacarse leche para que otra persona le ofrezca al niño o niña. Teniendo en cuenta que el bebé necesitará mayor cantidad de la habitual para hidratarse”. 

VACACIONES

“Si en las vacaciones la familia viaja, la lactancia es una gran aliada. La leche materna es cómoda de administrar (directamente ´del envase´), disponible en cualquier momento, a temperatura justa, y lista para consumir. Garantiza que el bebé esté hidratado todo el trayecto y al ser fácil de digerir, el bebé no tiene sensación de estómago lleno y evitás mareos y vómitos. Por otro lado la leche humana presenta un aminoácido L-Triptófano, que ayuda a relajar al bebé y lo induce al sueño. La lactancia además previene una de las patologías más frecuentes y de gravedad del verano, como es la gastroenteritis”, concluyó.

La tasa de lactancia materna exclusiva a los seis meses en América Latina y el Caribe, a partir de cifras de Unicef de 2021, alcanza el 37%, lo que pone a la Argentina en un lugar destacado en la región teniendo en cuenta que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) establece que la lactancia es la “forma óptima de alimentar a los bebés, ofreciéndoles los nutrientes que necesitan en el equilibrio adecuado, así como brindando protección contra las enfermedades”. La Organización Mundial de la Salud (OMS) se posicionó de manera similar.

Las y los especialistas en pediatría advierten que hay que seguir trabajando en forma multidisciplinaria para que se cumpla todo un abanico de medidas que contribuyan a que esa cifra siga creciendo en forma sostenida. Las oportunidades de seguir mejorando el indicador en Argentina vienen de la mano de la implementación de diferentes políticas facilitadoras ya legisladas, tales como la prolongación de las licencias de maternidad, la flexibilización de los horarios laborales, la instalación de lactarios o guarderías y la adaptación de los lugares de trabajo.

BENEFICIOS
Según un nuevo estudio, favorece el desarrollo del cerebro del bebé
La lactancia materna es fundamental para el desarrollo del cerebro del bebé, según un nuevo estudio realizado en la Universidad de Colorado. A pesar de que la Organización Mundial de la Salud recomienda la alimentación exclusiva con leche materna durante los primeros seis meses de vida, cualquier cantidad de leche materna puede beneficiar al niño, incluso si se combina con la alimentación con leche de fórmula.
La investigación se centró en el análisis del “metaboma fecal”, es decir, los metabolitos presentes en el intestino y eliminados a través de las heces. Estos metabolitos, producidos por las bacterias intestinales durante la metabolización de los alimentos, influyen en el desarrollo cerebral y otros órganos. Se recolectaron muestras fecales de 112 bebés de entre uno y seis meses de edad y se compararon los metabolitos presentes en aquellos que fueron amamantados en mayor medida frente a los que fueron alimentados con fórmula. Además, se realizaron pruebas cognitivas, motoras y de lenguaje a los dos años para evaluar el desarrollo de los niños.
Los resultados mostraron diferencias significativas en los metabolitos presentes en las muestras de los diferentes grupos de alimentación. La leche materna aportaba metabolitos asociados con un mejor desarrollo cerebral, como el colesterol, que favorece la formación de circuitos saludables entre las células cerebrales. Sin embargo, la cafeína, presente en el café que consumen algunas de las madres lactantes, se asoció con puntuaciones cognitivas más bajas.
Asimismo hay que considerar que los patrones de alimentación temprana son solo uno de los muchos factores que contribuyen a este desarrollo.

Aspectos de la legislación
La Ley N° 26.873 de Promoción y Concientización Pública de la Lactancia Materna impulsa -entre otros considerandos- la creación de centros de lactancia y bancos de leche materna, y en el ámbito laboral propicia la creación de espacios Amigos de la Lactancia.
Por otro lado, el Plan 1000 Días -que ha tomado protagonismo actualmente por alertas de diversos sectores en relación con modificaciones que propone el Gobierno nacional- recomienda la “instalación de un Espacio Amigo de la Lactancia (EAL) permanente en todo ámbito de trabajo donde se desempeñen 20 o más personas con capacidad de gestar o en edad fértil”.
Otras normativas que contemplan los derechos de quienes dan de lactar son la Ley de Contrato de Trabajo (Art. 179) y la ley conocida como Ley de 1000 días (N° 27.611).
Las y los especialistas reconocen que muchas veces aspectos logísticos son los verdaderos enemigos del sostenimiento de la lactancia. Con frecuencia, mantener la lactancia exclusiva se dificulta cuando la madre debe regresar a su trabajo, las barreras son muchas y el entorno no ayuda. Por esto también es fundamental el establecimiento de redes.
En la última ENaLac, las madres refirieron que el abandono de la lactancia se da porque “tuvieron que salir a trabajar”, “era muy difícil amamantar y sostener las otras tareas”, entre otras razones.
Los beneficios de la lactancia se observan a corto y a largo plazo: disminuye la incidencia de la aparición de las enfermedades comunes de la primera infancia y brinda beneficios en la salud de la vida adulta.
También confiere beneficios a la madre lactante, como efectos favorables en el metabolismo del calcio, disminución del riesgo de osteoporosis, mejoras en la salud cardiovascular y reducción del riesgo de desarrollar cáncer de mama y de ovario, entre otros.