miércoles, 5 febrero, 2025
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Ginés González García presentó su primera novela “Amantes y alquimistas”

HOY, EN LA SOCIEDAD FRANCESA

El exministro de Salud de la Nación compartió con la ciudadanía nicoleña su obra, recientemente publicada por Ediciones Ciccus. Lo hizo acompañado por la poeta Flor Codagnone, curadora de libros, quien ofició de guía en el proceso de escritura y desarrollo de la novela.

De la Redacción de EL NORTE
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En un encuentro realizado esta tarde en la Sociedad Francesa, el exministro de Salud de la Nación, Dr. Ginés González García, presentó su primera novela titulada “Amantes y alquimistas”. Se trata de una obra que desarrolló durante más de dos décadas pero que terminó de escribir alejado ya de la función pública, y que finalmente llegó a las librerías a través de Ediciones Ciccus.

Durante la presentación en nuestra ciudad, el autor se encontró acompañado por la poeta Flor Codagnone, oriunda de Capital Federal, curadora de libros, quien ofició de guía en el proceso de escritura y desarrollo de la novela.

La misma relata una historia que transcurre en San Nicolás entre 1810 y 1830. “La sorprendente primera novela de Ginés González García trata sobre el amor”, escribió en el inicio del prólogo el escritor Jorge Asís.

Ahondando en la novela, uno de los personajes que allí aparecen es Juan Manuel de Rosas, que mantiene un diálogo con su protagonista. Acerca del motivo por el que decidió incorporarlo en la historia, Ginés comentó: “Rosas gobernó la provincia de Buenos Aires desde San Nicolás durante 9 meses en ese tiempo, y me pareció que había que aprovechar esa circunstancia. El diálogo tiene algunas aristas patrióticas, pero traté de que no fuera ningún contenido ideológico”.

“Siempre he sentido que soy de San Nicolás y lo digo con orgullo”, enfatizó el sanitarista al culminar su presentación.

El prólogo de Jorge Asís

Amantes y alquimistas, la sorprendente primera novela de Ginés González García, trata sobre el amor. Hilario y María componen una historia sublime, que acumula las herencias ambiciosas de la literatura gauchesca, con una sucesión de puesteros, facas, yerras, arroyos, cañas y pulperías que tributan pelea, al tiempo que ponderan y homenajean a la patria chica del autor como una ciudad con superior bagaje cultural.

Un coro de personajes, entre los que se destacan María, la hija adolescente del puestero Ugalde; Mimbí, alquimista criolla que cura con “cortezas” y “tisanas”, y protege a su nieta del acoso sistemático de Carlo, rival perverso e hijo del poderoso Santella; y el perro Tragavientos, compañero cómplice de Hilario en la excursión hacia “más allá del Salado”, tierra del “indio”. En la historia, se suceden alusiones a la guerra con Paraguay, episodios conmovedores, como la ceremonia del toreo, un encuentro estéticamente memorable del protagonista con Juan Manuel de Rosas, además de la fantasía que propone el “territorio de la alquimia”.

Este texto capta la tensión emocional de la mitológica cinematografía del Leonardo Favio de Aniceto o, acaso, de Juan Moreira. La persistencia natural de la belleza es aquí un acto mecánico. El lenguaje se funde con la geografía, mientras la dinámica de la acción captura al lector e instala a Ginés González García en el peldaño más alto de la literatura argentina. Leer Amantes y alquimistas deriva en una aventura pasional.