martes, 25 marzo, 2025
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CATÁSTROFE HUMANITARIA EN AFGANISTÁN: ANTE LA GRAN FALTA DE ALTERNATIVAS DE VIDA, LAS FÉMINAS APARECEN COMO MONEDAS DE CAMBIO EN ESTE SISTEMA

La crisis alimentaria que pende sobre el país ha agravado la situación de las menores afganas, muchas de las cuales son vendidas por sus padres para poder proveer de alimentos a sus familias.

La catástrofe humanitaria que se viven en Afganistán luego de la retirada de las tropas de Estados Unidos y sus aliados, ofrece ribetes sorprendentes y desoladores.

Entre las víctimas directas están, como suele ocurrir, las mujeres y niñas. Ante la gran falta de alternativas de vida, las féminas suelen aparecer como monedas de cambio en este sistema. Así las familias buscan “soluciones” para acceder a la comida, la atención médica y los recursos financieros, según ha revelado la propia ONU.

La pavorosa situación en la que se encontraban las mujeres afganas desde hace mucho tiempo, ahora es peor, desde que volvieron al poder de los talibanes en agosto. El talibán las privó de acceder a los empleos mejor remunerados y golpeó con gran fuerza a los hogares donde las mujeres son sostenes de la familia, según información revelada por la organización Human Right Watch.



“Este difícil contexto ha derivado en una amenaza de hambruna en el país que conlleva más atrocidades hacia las niñas de edad, con numerosos padres que se ven empujados a vender a sus hijas para poder proveer de alimentos a sus familias. En las últimas semanas se han registrado varios casos de venta de menores de edad destinadas a convertirse en esposas incluso antes de llegar a la pubertad”, revela Rt, a su turno.

Unicef, Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia publica al respecto que “sobre ventas de niñas de tan solo 20 días de edad por una dote. Según las estimaciones del organismo, el 28 % de las mujeres afganas de entre 15 y 49 años se casaron a una edad menor a los 18 años. Incluso antes de que los talibanes retomaran el poder en el país, los socios de la Unicef reportaron sobre 183 matrimonios infantiles durante los años 2018 y 2019 solo en dos provincias afganas”.



Sigue Unicef: “Los matrimonios forzados dejan a las niñas atrapadas en la pobreza, ya que les impiden tener ninguna posibilidad de formarse ni de obtener un trabajo remunerado, convirtiéndose en víctimas de la denominada ‘esclavitud contemporánea’. Este problema se volvió más grave cuando los talibanes se hicieron con el control de Kabul y las nuevas autoridades vetaron a las chicas el acceso a la educación secundaria”.

En la actualidad, “unos 18,8 millones de afganos tienen dificultades para conseguir comida cada día y este número podría aumentar hasta los 23 millones a final de año, según las previsiones de la Organización de la Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, en inglés)”. Y concluye; “La gravedad de la situación ha empujado a gobiernos y organizaciones internacionales a encarar el problema y programar el envío de ayuda humanitaria a pesar de las sanciones impuestas contra los talibanes”.